Deja de memorizar: Usa la Técnica Feynman para aprender de verdad
¿Cansado de memorizar sin entender? La Técnica Feynman, creada por un premio Nobel, es el método de aprendizaje que transforma conceptos complicados en explicaciones simples y claras. Aprende a aplicarla paso a paso.
¿Te ha pasado que lees y relees un párrafo una y otra vez, pero tu cerebro se niega a retenerlo? ¿Que apruebas un examen y a la semana siguiente no recuerdas nada? El problema no es tu memoria, es tu método. Bienvenido al antídoto contra el estudio infinito e inútil: la Técnica Feynman.
Este poderoso método de aprendizaje no es un invento nuevo de un gurú de la productividad. Fue creado por Richard Feynman, físico ganador del Premio Nobel, famoso por su capacidad para desmenuzar las ideas más complejas y hacerlas comprensibles para cualquiera. Su premisa era brillante en su simplicidad: “Si no puedes explicarlo de manera simple, es que no lo entiendes lo suficiente”. Esta frase es la base de todo un sistema de comprensión profunda.
La Técnica Feynman va más allá de la memorización; se trata de desarmar un concepto y volver a armarlo con tus propias palabras, identificando y reforzando every single point flaco en tu comprensión. Es el método de estudio perfecto para universitarios que buscan eficacia y resultados reales.
Los 4 pasos para convertirte en un maestro de la explicación
Aplicar este método de aprendizaje es sencillo y solo requiere de un bolígrafo, papel y mucha honestidad contigo mismo.
- Elige y escribe el concepto: Toma una hoja en blanco y escribe en la parte superior el tema que quieres dominar. Puede ser desde “la fotosíntesis” hasta “qué es la derivada de una función”. El acto de escribirlo ya es el primer paso para concretarlo.
- Explícalo con palabras simples (como a un niño): Este es el corazón del método. Escribe una explicación del concepto como si se lo estuvieras enseñando a un niño de 12 años. Evita la jerga técnica y el lenguaje complicado de tu libro de texto.
Si te atascas o te das cuenta de que estás usando términos que no podrías explicar a su vez, ¡enhorabuena! Acabas de encontrar una brecha en tu conocimiento. - Identifica las lagunas e investiga: Revisa tu explicación. ¿En qué parte fue más difícil simplificar? ¿Dónde recurriste a un tecnicismo porque no sabías cómo traducirlo? Esas son tus lagunas de conocimiento.
Vuelve a tu material de estudio, investiga específicamente esos puntos débiles y refuerza tu comprensión hasta que puedas explicarlos también de forma sencilla. - Revisa y simplifica: Ahora, con tu nuevo entendimiento, revisa tu explicación inicial. Simplifícala aún más. ¿Puedes usar una analogía o un ejemplo práctico para hacerla más clara? Léela en voz alta.
Si suena confusa, repite el ciclo. El objetivo es crear una explicación tan clara y concisa que sea imposible no entenderla.
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¿Por qué este método de estudio es tan efectivo?
La Técnica Feynman funciona porque combate la ilusión de competencia. Muchas veces creemos que sabemos algo porque reconocemos los términos, pero en realidad no podemos articular el significado detrás de ellos. Este proceso te obliga a:
- Procesar la información activamente, no de forma pasiva.
- Identificar con precisión lo que no sabes.
- Construir esquemas mentales sólidos mediante analogías y ejemplos.
- Retener la información mucho más tiempo al haberla “digerido” por completo.
Es una de las técnicas de aprendizaje más recomendadas por su eficacia probada para fomentar una comprensión profunda. No se trata de un hack de productividad vacío, sino de una estrategia de estudio robusta que promueve el aprender a aprender.