Una nueva generación de 25 guacamayas rojas nacidas y criadas en cautiverio fueron liberadas, después de un periodo de preparación de casi cuatro meses, el 23 de marzo de 2014 en las selvas de Palenque, Chiapas, como parte del proyecto de reintroducción de esa especie, que encabeza el Instituto de Biología (IB) de la UNAM, el Aluxes Ecoparque Palenque y el Parque Eco-arqueológico Xcaret de Quintana Roo.
Catalogada como especie en peligro de extinción y ausente en 98 % de su distribución original en México que iba del sur de Tamaulipas a Veracruz, Tabasco, Oaxaca y Chiapas , regresó hace un año a la selva de Palenque gracias a una iniciativa coordinada por Alejandro Estrada Medina, investigador del IB, que junto con un grupo de colaboradores cuida de las aves durante su desarrollo y les enseña a sobrevivir en libertad.
Luego de la etapa de liberación, inicia la de vigilancia y monitoreo de los individuos. Cada espécimen tiene un chip subcutáneo, un anillo metálico con un código en una de sus patas y una marca en el pico que permite identificarlo a lo lejos.
Algunos llevan radio collares para ser detectados por tierra y desde torres, y otros, transmisores para rastreo satelital.
El proyecto contempla la liberación de 60 a 70 guacamayas rojas por año entre 2013 y 2015, periodo en que se analizará una posible ampliación por un bienio más.
La meta es lograr, en tres años, el establecimiento de una grupo reproductivo de unos 200 individuos en la selva del municipio de Palenque, donde la guacamaya roja estuvo extinta durante 70 años, hasta que en 2013 se reintrodujeron 48.